domingo, julio 05, 2009

Ergas y orongas


Me gustan los retratos de Marcos Zimmermann desde hace años. Lejos de los estereotipados chongos de calendario, los suyos son hombres comunes, verdaderos laburantes de todo el continente, que posan con sus partes al viento, con orgullo.
Es raro que el desnudo supere la carga erótica y la objetivación del sujeto, y a mi criterio, en esta serie ambas cosas quedan atrás, se va mucho más allá. No es pura homoeroticidad, que la hay, ni tampoco un afán ridiculizador, sino que se siente un interés genuino por el otro, un afecto y curiosidad muy sinceras.
Sorprende, por anacrónico, el esfuerzo de la editorial Lariviere al financiar el proyecto, viajes, equipo, pago a los modelos, y además después publicar un libro. Parece Steidl más que una editorial argentina.
Excelente la nota de María Moreno en el último Radar.
No pude ver la muestra, "Desnudos Sudamericanos" (hasta fin de mes en el Palais de Glace) ni el libro, trataré de hacerlo en cuanto la paranoia N1H1 y la estrenada paternidad me lo permitan.

No hay comentarios.: